Bueno, aquí les traigo la segunda parte de esta historia de mi contacto con la tradición budista...

Discúlpenme la demora en la publicación de esta segunda parte, pero bueno, aquí vamos, que es lo importante, no?

(Antes de comenzar, quiero agradecer enormemente todas sus visitas a este sitio, el cual he dedicado tiempo, esfuerzos y mucho amor, para que se pueda ver aquí plasmado, mi ser, que tenga un sello personal, y que puedan, uds, los que lo visitan, disfrutar de un sitio ameno, donde puedan leer cosas agradables y no simplemente “lo que el autor se le de la gana de escribir, porque es mi espacio, y PUNTO!!”, pienso que si abrimos un espacio en el cual compartirás intereses, opiniones, o lo que se relacione con interacciones con otras personas, no es muy sano decir “Hago lo que quiero aquí, y si les gusta bien, o si no de malas”, es decir, en este tipo de sitios tan personales, es donde se muestra en realidad gran parte de tu ser, y personalmente, considero que es mejor no abrirlos, si vas a estar en una actitud ofensiva para con los demás, no es cierto?)

Como les venia contando hace ya vaaarios meses, mi incursión en este bello camino que es el dharma, la palabra de buda, se dio de una forma muy particular, la cual creo que si no se hubiera presentado de esa manera, aun creo que habría tenido contacto directo con el budismo de otra forma, gracias a la acumulación de karma de mis vidas pasadas.

A que me refiero con esto?, que debo de terminar lo que todos comenzamos, algunos somos concientes pronto, otros tarde, pero siempre debemos de cumplir con nuestro fin ultimo.

Luego de ese “contacto definitivo”, mi interés empezó a crecer de forma exorbitante, comencé a buscar en los libros de la casa todo lo relacionado al tema, devoraba lo poco que encontraba a mi camino, hasta que decidí ir un poco mas allá e investigar lo mas básico del budismo en el internet, estaba absorto con el como me identificaba con la filosofía budista y por fin me sentí…. Pleno…sentí que esas doctrinas harían que descubriera mi verdadero potencial por medio de métodos que miles de iluminados han utilizado para descubrirse ellos mismos y convertirse en seres maravillosos…

Fue en el internet precisamente cuando llegué a una pagina de un centro de meditación budista en Bogotá, el cual me llamó bastante la atención y del cual adquirí gran cantidad de información de utilidad, por lo cual me dio curiosidad y a la vez surgió una gran necesidad de entrar en contacto directo con un practicante budista, por lo cual decidí escribir a un vinculo de correo que aparecía en la pagina.

Recibí una pronta respuesta, era el director del centro, y me agradecía mi interés y el hecho de haber escrito, me comencé a hablar con el de forma mas continua y comencé a plantearle la gran cantidad de inquietudes e interrogantes que me surgían día a día en mi avance por el camino budista, a las cuales el muy amable y compasivamente me ayudaba a despejar.

Fue así que muchos meses después de este contacto inicial, en los cuales me sumergí un poco más en las doctrinas, decidí conocer el centro budista, en Bogotá; aprovechando un viaje de emergencia que surgió de forma imprevista por razones de negocios, me vi mas pronto de lo que pensé en la capital colombiana.

Recuerdo muy bien que viajé un sábado, el cual me dedique a realizar otros asuntos, pero en horas de la noche, cuando ya los había finalizado, de repente recordé el centro y que aun había tiempo de visitarlo, a pesar de que ya estaba un poco tarde.

Tenia en mi billetera anotado en un papel, la dirección y teléfono del centro, así que comenzamos (ya que me acompañaban mi mamá y su novio) la búsqueda del centro, era una noche muy fría y además comenzó a llover mucho; buscamos y buscamos por espacio de una hora, hasta que por fin, pudimos dar con el sitio, el cual no se parecía lo que me imaginaba, por el contrario, me encanto muchísimo mas!!

Toque a la puerta, cuando me abrió una mujer, con una bella y calida sonrisa en sus labios, a la cual le comente lo sucedido, y me dijo que Mauricio no se encontraba en el centro, pero que si lo deseaba, podía seguir, para que conociera las instalaciones del centro, habláramos un ratito y nos tomáramos un té….

Para no cansarlos por ahora, dejare lo que resta para una tercera y ultima parte, un abrazo inmenso a todos y mil gracias de nuevo por visitar este blog, que como saben, es su casa, a la cual están bienvenidos cuando lo deseen :)